La adopción de cajas de autoservicio se acelera a medida que los clientes buscan comodidad y seguridad
Hasta hace poco, era raro encontrar terminales de autoservicio (SCO) en las tiendas. Sin embargo, en los últimos tiempos, la adopción de estas soluciones ha experimentado una aceleración notable, con un aumento del 25 % en los envíos de terminales en 2020, según un estudio de RBR.
Tras más de un año de distanciamiento social, las tiendas reconocen la importancia de recuperar la confianza de los consumidores, especialmente de los más vulnerables y precavidos, ofreciendo opciones de compra con un mínimo contacto, como las cajas de autoservicio.
Es crucial recordar que reducir el contacto durante el proceso de compra no implica que la tienda se convierta en un simple punto de recogida.
Adopción de las cajas de autoservicio
La tecnología SCO permite ofrecer a los clientes todos los beneficios de la experiencia tradicional en tienda, pero con filas más ágiles y la opción de mantener una distancia segura tanto con el personal como con otros compradores al escanear y pagar sus productos.
Las encuestas revelan que los clientes perciben las terminales SCO como más seguras y rápidas que las cajas tradicionales. Incluso cuando hay filas, muchos optan por esperar porque confían en que avanzarán más rápido o porque simplemente valoran la comodidad de escanear sus productos ellos mismos.
El autoservicio ha ganado popularidad impulsado por el rápido crecimiento de los pagos sin contacto, primero con tarjetas y cada vez más a través de smartphones. Este avance fue clave para abrir la puerta a la adopción masiva de SCO, inicialmente liderada por los supermercados, que llevan años buscando formas de reducir las filas en las cajas.
Comodidad y seguridad
En el último año, la adopción de SCO ha cobrado impulso, con minoristas de diversos sectores reconociendo que no solo optimiza los niveles de personal en tiempos de incertidumbre, sino que también brinda tranquilidad a los clientes preocupados por minimizar el contacto físico y acelera el proceso de compra.
La tienda cuenta con 13 cajas tradicionales atendidas, pero estas están claramente superadas por las 36 terminales SCO, como se aprecia en la primera foto.
Otra ventaja de las opciones de autoservicio es que permiten reconfigurar fácilmente la distribución de la tienda, dado que las terminales ocupan menos espacio. En la tienda IKEA que visité, la segunda foto muestra algunas terminales de autoservicio donde los clientes pueden pedir y pagar sus productos.
Estas terminales están ubicadas lejos del área de cajas tradicional, en el vestíbulo, para captar la atención de los clientes antes de que entren en la tienda.
Hace unos años, muchos minoristas cuestionaban el valor de las terminales SCO, lo que en algunos casos provocó que las implementadas como proyectos piloto fueran retiradas. Sin embargo, ahora es evidente que esta tecnología ha llegado para quedarse.
Soluciones como Orisha Retail Chains permiten a los minoristas avanzar en la adopción de sistemas SCO, ya sea de forma independiente, integrándose con su solución POS “legacy” existente, o como una solución única e integrada capaz de adaptarse a diferentes escenarios, ya sean atendidos, desatendidos, fijos o móviles.